Una tarde lluviosa...y yo atrapada en el teatro [Aleyah]

Suspiré mientras le daba un trago a mi café, capuccino doble con chispas de chocolate. La obra había terminado hacía 45 minutos y yo me había quedado atorada en mi fantástico vestido rojo, lo que había logrado que me quedara aquí atrapada mientras esperaba a que la lluvia bajara un poco de intensidad. Todavía quedaban algunos espectadores en el teatro, los cuales al verme caminar por ahí me saludaron y me felicitaron por la actuación de aquella tarde. Sí, había salido excelente gracias a que Bryan y yo habíamos discutido un poco y eso le había impreso pasión a la actuación de ambos.

Después de agradecerles y de tomarme un par de fotos con unas niñas adorables, fui a sentarme a una mesa mientras bebía un sorbo de café con la mirada perdida. Casi nunca peleaba con Bryan, pero ciertas veces él daba por sentado que yo estaría ahí, y me dolía que él siguiera pensando que nunca me iría de su lado. Cosa que no haría hasta que él me apartara, pero quería que entendiera que, pese a ser su mejor amiga, yo también podía irme.

Pero negué con la cabeza, no quería torturarme con ello, por lo pronto disfrutaría mi café y esperaría a que dejara de llover, tras lo cual me iría a caminar al parque a pensar un rato, y luego volvería al apartamento.

Jordan idiota... se suponía que tenía que esperarme para regresar juntos a casa, pero como la obra había sido un éxito, él se había largado quién sabe a dónde y con quién. La verdad no me importaba a dónde se hubiera ido, me molestaba que pudiera estar con alguna mala mujer que sólo estuviera interesada en su dinero o en lo que podía conseguir de él... hoy en día hay cada zorra... y Jordan que anda por ahí y no se da cuenta de las malas intenciones de la gente ¡ARGH!

Decidí que lo mejor era esperar a que la lluvia se calmara un poco, ya que yo no había llevado mi auto; ¿para qué llevarlo si en teoría me iba a regresar con mi hermano? Bueno, ya... mejor no hacía tanto drama e iba por algo caliente a la cafetería. Pedí un chocolate caliente y a lo lejos vi a Sylvie. Yo había hablado un par de veces con ella y me parecía buena chica, además de que era una excelente actriz "y la novia de Bryan" dijo mi mente para torturarme y yo simplemente suspiré para apartar la frustración.

- Hola Sylvie, estuviste genial hoy - le dije mientras me acercaba y me percataba de que seguía con el vestido de la última escena. Si Layla la veía con eso, posiblemente le arrancaría el vestido con todo y piel - Sylvie, no es que sea mi asunto... pero... ¿Layla no se va a enojar si ve que no te has cambiado el vestido? - Layla era una maniática y por alguna razón nos odiaba a Sylvie y a mí. Yo nunca le había hecho nada, es más, ni siquiera hacía vestuarios para mí, ya que yo siempre estoy tocando mis instrumentos en el backstage... pero en fin, siempre hay gente demente por ahí.

Estaba sumida en mis pensamientos cuando oí que alguien me llamaba por mi nombre y me felicitaba por la actuación de ese día y yo sonreí al voltear y ver a Aleyah, una chica que tocaba dentro de la orquesta y que lo hacía más que bien. Ella me caía de maravilla, era una chica con la que era fácil hablar y no me resultaba nada difícil platicar con ella de cualquier cosa.

- Hola Aleyah, gracias, me alegra que te haya gustado - le dije con una radiante sonrisa mientras la invitaba a sentarse conmigo, no me apetecía estar aquí sola y qué mejor compañía que ella - ¿qué haces por aquí? vi a tu hermano salir y creí que te irías con él

Ella me dijo que si no debía de quitarme el vestido y yo negué con la cabeza mientras le enseñaba el pequeño razgón que le había dado por quedarme atorada en el balcón tras la escena del beso.

- Pues no en realidad, Nate casi me mata porque me atoré y me mandó a que yo misma lo cosiera, así no olvidaría nunca que debo de tener cuidado...además, si con esto logro poner a Layla un poco histérica, no dudes que lo haré - dije guiñándole un ojo con complicidad.

Correspondí el saludo con una sonrisa y cuando mencionó que mi hermano había salido, noté que una mueca de molestia y fastidio se dibujaba en mi rostro... ya iba a ver mi "querido hermanito" cuando le pusiera las manos encima - ¿ah sí? ¿me disculpas un segundo? - Me alejé un par de pasos, pero ella podía escuchar lo que decía. Llamé a Jordan y el muy tonto no me respondió el celular. Con molestia tuve que dejarle un mensaje - ten miedo de que llegue a casa, Jordan Battenberg... y que tu miedo se vuelva terror si llego empapada... ¡esta me la pagas! - fue lo único que atiné a decir, con voz fría, sin gritar... no quería perder los papeles en un lugar público y cultural.

- Perdona, es que se suponía que Jordan tenía que esperarme, pero seguro se fue con los otros chicos del teatro a celebrar que salió bien la obra... ¡argh! ¡hombres! - me quejé mientras me sentaba a su lado y ella me contó la historia del vestido. Yo reí... la verdad es que todos vivíamos para hacerle la vida imposible a Layla - Yo no sé por qué nos odia, Sylvie... bueno al menos me parece que nos odia... siempre nos ataca gratuitamente - dije mientras me encogía de hombros y me imaginaba a Layla regañando a Sylvie por no cuidar el vestido y a mí porque simplemente estuve ahí. Layla a veces era tan ridícula

OBservé como Aleyah se alejaba e iba a marcarle a su hermano, yo escondí una enorme sonrisa mientras me tomaba un trago de café, pobre Jordan, quizás lo mejor sería acogerlo en el sofá del departamento hasta que la furia de Ale se calmara. Ella regresó y me hizo reír con su frase de "hombres".

- Sí, no tienes que decírmelo, vivo con uno y que también es actor, sé con lo que lidias - le comenté intentando mostrarme solidaria con ella, los actores eran difíciles.

La verdad es que ahora uqe lo pensaba, sólo Ale y yó éramos las víctimas de los malos tratos de Layla, ya que el otro día hablando con Bryan, él me dijo que con él era un amor de persona.

- Creo que sólo es con nosotras Ale, seguramente Layla nos tiene envidia por ser lindas y talentosas - le dije restándole importancia al hecho de que Layla nos odiara - además ¿qué puede hacernos? ¿regañarnos más que a los demás? A mí me tiene sin cuidado

Cuando dijo que no tenía que decírselo supe inmediatamente que Sylvie me comprendía a la perfección... ella era actriz y podía entender un poco mejor a alguien que es actor, además ¡vivía rodeada de ellos! hasta que mencionó que vivía con un actor y la imagen de Bryan vino a mi cabeza. Mi conciencia me regañó casi inmediatamente... ¿qué diría Sylvie si supiera que me gusta su novio? Posiblemente no me volvería a hablar jamás y le pediría a Jordan que me saque de este lugar... o tal vez no. Bueno, de cualquier forma no iba a averiguarlo, porque aunque sentía que Bryan y yo teníamos una conexión especial, lo más probable es que yo estuviera confundiéndolo todo, como siempre, y él simplemente fuera igual de amable y sincero con todas las personas que conoce.

Decidí entonces enfocarme en el tema que nos interesaba: Layla. Era tan genial que Sylvie también pensara como yo, que Layla nos odiaba a ambas por alguna razón desconocida y lo más seguro es que fuera por envidia, y envidia de la mala - es cierto, Syl... yo creo que es envidia, porque ella solamente puede coser y hacer vestuarios... lo suyo no es estar en un escenario, ni como actriz ni como intérprete - dije riendo. Cuando preguntó qué podía hacernos, hice una mueca de disgusto - a mí me metió en problemas con Nathaniel la otra vez... creo que quería que me corrieran... y te soy sincera, Sylvie, a Nathaniel le dará igual tenerme a mí que a cualquier otro músico... yo no soy su mejor actriz, por eso creo que a ti no puede hacerte absolutamente nada - dije con tristeza.
Y de hecho sí había tratado de que me corrieran. Jordan me había pedido que recoja su vestuario y yo había ido a eso, pero ella me vio con el traje en la mano y me acusó de saboteadora, ladrona y quién sabe qué más. Y como no le explicó a Nathaniel lo que había pasado, sólo que yo "quería sabotearle la obra" Nathaniel me mandó un sermón horrible, hasta que yo le expliqué todo. Claro que luego le dije unas palabras poco agradables a Layla, pero estaba segura de que ella quería que yo me vaya... y yo no quería irme. No iba a dejar a Jordan solo. Si me iba, me iba con Jordan y como Jordan no se va a ir, pues entonces haré lo que sea para quedarme...

Observé a Aleyah mientras le daba otro trago a mi café, ella era una persona muy linda y agradable, me gustaba poder pasar mi tiempo libre con ella, era interesante hablar con ella y además era divertido. A pesar de ser tan dulce tenía un lado malvado y era la mejor compañera de travesuras que se podía pedir, más cuando éstas involucraban a Layla Kelly.

Aunque yo decía que no sabía por qué nos odiaba, la verdad era que me hacía una pequeña idea de que aquel odio no podía ser infundado, y si más mal no me equivocaba, se trataba de Bryan. O al menos eso de mi parte. Mi mejor amigo era siempre seguido por las miradas de las chicas y como todos creían que éramos novios, pues a menudo recibía miradas hostiles por ello.

A lo mejor a Aleyah la obiaba por su enorme talento en la música. Así que negué cuando oí su comentario.

- Vamos, no es así linda, tocas bellísimo, y Nate sabe que no encontrará a ninguna otra chica como tú - dije intentando consolarla.

Sylvie era tan linda y tan buena conmigo... era una de las pocas personas que se habían vuelto mis amigas en el teatro; ya que la mayoría me miraba mal, pensando tal vez que había entrado por los contactos de mi padre o por intermedio de Jordan. Daba igual. Pero les demostraría a todas que estaba ahí por mi talento y no por lástima.

- Gracias Syl... eres tan buena conmigo... no todos me han recibido con los brazos abiertos... sólo Santiago, Bryan, tú y mi hermano... y de verdad te agradezco por todo - le dije con sinceridad. De alguna manera me alegraba que Bryan estuviera con una chica tan buena y linda como Sylvie, ella seguramente lo querría mucho y lo haría feliz. - Pero te aseguro que esa vez Nate estuvo a punto de correrme... resulta que Jordan me pidió que cogiera su vestuario y se lo llevara y en eso estaba cuando la bruja me pilló y me dijo que era una saboteadora y una ladrona. Ni siquiera me dejó explicarle nada. Me llevó del brazo hasta donde estaba Nathaniel para decirme que yo le estaba saboteando la obra... y Nathaniel se puso como un energúmeno y me dijo que si no me gustaba la obra pues podía irme, que la puerta estaba abierta, pero que era muy bajo sabotearlo... y que si no me había pagado una tal Stella - dije con molestia - claro que tuve que recordarle a Nate que rechacé a la Sinfónica de Londres para venir a tocar a este teatro en donde no me dan crédito por mis interpretaciones y que tocaba aquí por amor al arte y a la compañía... porque mi hermano estaba aquí. - suspiré - Nate se calmó y ahí le dije a la bruja esa que uno solo de mis zapatos vale más que todo el vestuario que ella diseña, así que de nada me serviría robarle algo si puedo comprar cosas mejores... y le aclaré que estaba tomando el vestuario de mi hermano porque lo necesitaba - desvié la mirada avergonzada - sé que fui muy hiriente y elitista, pero esa mujer saca lo peor de mí - me excusé. Yo sabía que no era excusa y que yo podía llegar a ser una persona horrible cuando me hacían enfadar, pero trataba siempre de controlarme.

LA verdad yo sabía lo que era entrar en una compañái y darte cuenta de que eras poco apreciado. Noe ra fácil ir al lugar al cual llegabas incómoda. Afortunadamente yo había llegado con Bryan y al poco tiempo ambos habíamos logrado adaptarnos.

- Sí, te entiendo, también fue difícil para mí, había días en los que Bryan literal tenía que sacarme de la cama porque no quería venir...yo sé, suelo ser un poco dramática de vez en cuando. Afortunadamente, Bryan siempre ha estado conmigo - dije sonriendo con cariño, adoraba a ese condenado.

Entonces escuché el drama que había provocado Layla y yo negué con la cabeza, yo había aprendido a no temerle y a demostrarle que aquí yo era la actriz y que ella sólo debía de tener las cosas listas, pero a mí un drama no se atrevía a armarme pues Bryan y yo éramos los consentidos de Nate.

- Descuida, nos aseguraremos de que Layla encuentre su lugar.

Bryan... ¿podría acaso no hablar de él? bueno, él era su novio así que ella podría hablar lo que quisiera de él; sin embargo me sentía un poco mal por empezar a sentir cosas raras con él... pero no podía evitarlo, él era tan lindo y amable conmigo... pero en fin, una no elige quién le gusta y quién no y si bien sentía algo por él, era más que obvio que nada podía pasar entre él y yo, así que tenía que olvidarme de él... pero ¡ay! ¡cómo me costaba!

- Me imagino... al menos Bryan estaba para apoyarte... Jordan me apoya, pero creo que no puede hacer mucho porque estamos en áreas diferentes... en fin, ya no importa... pienso quedarme aquí, quiera o no quiera Layla Kelly - dije con seguridad antes de tomar un sorbo de mi chocolate y no pude evitar preguntar por Bryan - hablando de Bryan, me sorprende no verlo por aquí... digo, pensé que celebrarían juntos el éxito de la obra y eso... - había sido un comentario inocente y de curiosidad normal. No quería que mi relación con Sylvie se pusiera tensa por ningún motivo. Ella era una niña muy linda y me agradaba bastante.

Bryan, Dios ¿qué sería de mi vida sin ese bobo? La verdad dudaba que hubiera podido tener el valor para pararme en un escenario. Además hacer las escenas de besos con él, me ayudaban mucho. Total, ya nos los habíamos dado en la vida real y ya no nos era difícil o incómodo. Nuestra relación jamás lo había sido.

- Cariño, Layla Kelly puede hacer muy poco para que tú y yo dejemos de estar aquí y más te vale que no renuncies que entonces me sentiré contigo, eres una gran amiga Ale, de verdad quiero que te quedes - le pedí tomando su mano y haciéndole "la carita".

Ella me preguntó el por qué Bryan no estaba conmigo y yo le di un trago de café mientras cruzaba mis piernas - Bueno, el que vivamos juntos no es que andemos siempre así, es bueno que cada uno tenga su espacio y me dijo que iría con unos amigos de la preparatoria a un bar...mientras no llegue con una chica, todo está bien.

Las palabras de Sylvie me reconfortaron mucho. Ella era tan buena conmigo y podía notar que me apreciaba bastante, al punto de amenazarme con sentirse conmigo si es que renunciaba. Yo sonreí al escucharla... poca gente era sincera y buena conmigo aquí - Gracias Sylvie... en realidad te agradezco por ser tan buena conmigo y por dedicarme siempre tan lindas palabras... la verdad es que en este poquito tiempo te he tomado bastante aprecio - confesé con una sonrisa - y no te preocupes que hace falta más que una Layla Kelly para que deje el teatro... he dejado el sueño de mi vida por venir a trabajar aquí y haré que valga la pena, te lo aseguro - dije antes de reír al verle poner su carita de cachorrito.

Dijo que Bryan había salido con unos amigos de la preparatoria y que era bueno que tuviera su espacio. Yo estaba de acuerdo con ella, pero... bueno, con Jordan yo era excesivamente celosa así que no podía decir absolutamente nada... hasta que dijo que estaría todo bien mientras no llegara con alguna chica - Oh Vamos, Sylvie... yo no creo que Bryan sea de esos chicos... se nota que te quiere y la verdad no creo que se busque otra chica teniendo una novia tan linda como tú, que además lo quiere y lo comprende y le da su espacio - lo decía de corazón. Bryan y Sylvie eran unos chicos maravillosos y se merecían el uno al otro, ya que estaba segura de que ambos eran felices juntos. Claro que no contaba con empezar a sentir algo por Bryan, pero ya se me pasaría... de verdad quería a Bryan y lo que más me importaba es que fuera feliz... además, yo ni siquiera tenía una oportunidad, ya que cuando llegué él ya andaba con Sylvie.

Me dolía pensar que Aleyah no había sido bienr ecibida en el teatro, ella era un encanto al igual que Jordan y me encargaría de jalarle las orejas a él por no ayudar a su hermanita en este cambio.

- Descuida linda, ya te presentaré a otras chicas de aquí que son un amor y que también odian a Layla...sabes, deberíamos hacer un club en su contra, no sé una pijamada vudú o lgo así - dije riendo de mi propia locura. Sólo a mí se me ocurrían esas cosas tan bobas.

Cuando ella dijo que Bryan tenía una linda novia como yo, no pude evitar soltar una carcajada. Estos rumores sí que estaban volándo límites. Claro, sabía que nuestra decisión de vivir juntos les había dado pasto a los paparazzis para que comenzaran los rumores, pero aquí en el teatro parecía que pocos los creían.

Tomé la mano de Ale con cariño.

- Linda, ¿no me dirás que crees esos tontos rumores de las revistas? Bryan y yo no somos novios, hemos sido los mejores amigos desde siempre...aunque una vez nos picó la curiosidad y anduvimos por 8 meses, pero no funcionó tan bien como esperábamos. Él es sólo mi mejor amigo, siempre lo ha sido y créeme que así estamos bien los dos.

Off: la pijamada vudú es de tu autoría neni, no quiero violar derechos de autor xDDD

Sylvie quería ayudarme sinceramente y yo no podía encontrar a alguien mejor que ella para que me ayudara a incorporarme a la compañía. Jordan también hacía lo suyo, pero como era relativamente nuevo no tenía demasiados amigos, así que no es que pudiera hacer mucho. Cuando dijo que deberíamos hacer un club, me reí - sí, un club suena bien y la pijamada vudú me parece espectacular... déjame ser la vicepresidenta del club y prometo componer el himno - dije entre risas. De hecho hace algunos días tenía una melodía en mi cabeza, pero era tan bonita que no la desperdiciaría en hacerle una canción a la bruja esa.

Me quedé fría cuando se rió de mí cuando dije que Bryan no se buscaría a otra chica teniendo una novia tan linda como ella. ¿Era porque ya él lo había hecho? no, imposible. ¿O era porque ella no creía que fuese linda? La respuesta me llegó al microsegundo siguiente cuando ella dijo que era un rumor de una revista... Fue bastante extraño porque entendía y no entendía al mismo tiempo, me había bloqueado temporalmente, hasta que me confirmó que no eran novios, sólo muy buenos amigos. Sentí algo extraño dentro de mí y, aunque no quería reconocerlo, me sentí feliz - bueno, no me culpes, no lo dicen sólo las revistas... también hay gente en el teatro que lo cree - dije antes de echarme a reír. De haberlo sabido antes... me daba risa que haya creído en los rumores y no confirmarlos directamente, además reía, de cierta forma, de felicidad - y yo ya los hacía casados y con hijos porque los veía muy unidos - dije tratando de contener la risa - lo siento, Syl... pero es que es tan irónico - suspiré. Nuevamente mi boquita de caramelo había soltado algo más de la cuenta. Tomé un sorbo de mi chocolate para obligarme a mí misma a callarme.

Off: wajajajaja neni morí con lo de la Pijamada Vudú... ¡Claro que me acuerdo! ¡Pobre Valerie! xDDDDD

BUeno, sin duda Layla debería de tener mucho cuidado cuando se tratara de nosotras porque no íbamos a dejar que se saliera con la suya. Me reí con ella al oír lo del himno y no pude evitar reírme con ella. Un himno le iría bien, pero quizás fuera darle demasiada importancia.

- Mejor es ignorarla, no queremos que piense que es importante para nosotros - dije terminando mi café.

Entonces comenzó el tema de Bryan, sí, no era la primera que nos decía que ya nos veían con hijos, y es que hasta su familia decía aquello, por no mencionar cómo se puso mi hermano cuando se enteró que viviría con él. Y algo que dijo, captó mi atención por completo.

- ¿Irónico? ¿Qué es irónico? - pregunté verdaderamente interesada, y no me detendría hasta saciar mi curiosidad

No, Layla no era importante y de verdad darle importancia posiblemente empeorara la cosas - Es cierto, Sylvie... posiblemente ella sólo quiera llamar la atención y estaríamos dándole lo que pide... es mejor ignorarla - dije dando otro sorbo a mi chocolate. Estaba demasiado bueno... pediría otro en cuanto me acabara éste.

Para Sylvie no había pasado desapercibida mi última frase... ¿qué era irónico? era irónico que yo haya estado tratando de olvidarme de él porque tenía novia cuando en realidad no la tenía... pero ¿cómo decirle eso? ella era su mejor amiga ¿si se lo decía y luego él ya no quería hablar conmigo? ¿y si Sylvie se enojaba? ¿y si ella no quería verlo conmigo? eran tantas cosas y tantos riesgos que no quería correr, así que simplemente sonreí - es irónico que todos los vean juntos, menos ustedes mismos... pero supongo que esas cosas pasan - dije no muy convencida. Seguro y se daba cuenta que me había puesto algo nerviosa, como sea, la actriz es ella, no yo... y actuar no es algo que se me de bien.

De pronto vi que Layla pasaba a lo lejos y en ese momento amé a esa mujer - Oye Syl, por ahí está la bruja... mejor no dejamos que nos vea... bueno, en realidad que te vea con el traje de Julieta - le dije cambiando el tema totalmente... esperaba que ella no me preguntara más o empezaría a enredarme.

Observé a Aleyah con una ceja levantada. No le creía ni una palabra, vamos ¿a quién quería engañar? llevaba toda mi vida actuando, así que sabía cuando alguien mentía u ocultaba las cosas. Y definitivamente mi amiga estaba ocultándome algo...y con el mejor amigo que tenía, no había que ser una genio para saber lo que pasaba por su cabecita.

- Vamos Ale, eso no es irónico, probablemente lo irónico sea que tú te sientas atraída por mi mejor amiga y ahora sientes algo de alivio porque sabes que no tiene novia - dije meramente adivinando, pero pensando que estaba más que acertada.

Y ahora que lo pensaba, Aleyah era una chica dulce, linda y hermosa, perfecta para Bryan. Cupido tiene una gran misión frente a él.

Entonces mencionó a Layla y yo me caí de la silla de manera accidental debido a la sorpresa y ahí me uqedé hasta que ella pasó. Me reí un poco de mí misma y mi torpeza.

- Por una vez mi torpeza sirve de algo - susurré levantándome y limpiando el vestido

Cuando la escuché hablar no pude evitar sentir que mis mejillas ardían sin control. Estaba plenamente segura de que estaba más roja que un tomate y eso sí que era obvio. Pero ¿cómo lo sabía? ¿cómo se había dado cuenta? ¿es que soy demasiado obvia? Oh por Dios... mi vida acaba de terminar.
- Oh vamos, Sylvie... ¡qué cosas te inventas! Has leído mucho sobre Romeo y Julieta - dije como quitándole importancia al asunto, pero su cara de escepticismo me quitaba la confianza cada segundo que pasaba, hasta que por fin suspiré derrotada - vale... acertaste... pero... no, no es nada, en verdad, es una tontería - me apresuré a decir... sin darme cuenta de que le estaba confirmando de que no era una tontería para nada. Me obligué a cerrar el pico de una vez; demasiadas metidas de pata para unos minutos.

Pero justo en ese instante apareció Layla y Sylvie se cayó del susto. No nos movimos hasta que la bruja se fue y la ayudé a levantarse - deberías tener más cuidado, Syl... Nate se muere si se queda sin Julieta - le dije tratando de apartar su mente de lo que le había dicho hace un instante.

Alcé una ceja al notar que ella no quería decir las cosas como eran, y quizás lo entendía, Aleyah había creído que Bryan y yo éramos pareja...y a decir verdad ¿quién no lo cree? Pero finalmente Aleyah admitió que estaba en la verdad, pero no me gustó el que no le diera importancia. Así que tomé su mano cariñosamente.

- Ale, cualquier cosa que te haga sentir, es importante, y no quiero que digasl o contrario..y si Bryan es quien te hace sentir, entonces permíteme decirte que acabas de ganarte a la mejor aliada para conquistar su corazón - dije guiñándole un ojo.

No eran necesarias las amenazas, sabía que si había alguien quien pudiera querer a Bryan como debía, era Aleyah.

Ale me ayudó a levantarme y yo me limpié el vestido con mi mano. al oír el comentario de ella, me reí, pues no era la primera en pedírmelo. De hecho Bryan lo decía con mucha frecuencia.

- Lo sé, prometo ser más cuidadosa en ese aspecto.

Sylvie era un ángel de Dios... tomó mi mano y me dijo que cualquier cosa que me hiciera sentir valía la pena... y la verdad es que yo siempre había sentido una pasión desmedida por la música y por eso mismo sabía que valía la pena dedicarle mi vida... pero con Bryan era diferente, era todo tan confuso y tenía miedo.

- Gracias Sylvie, de verdad... pero... la verdad... yo creo que no tiene sentido... ¡Vamos! él es uno de los mejores actores del país y yo sólo soy una niña rica que se dedica a la música y que siempre mete la pata... - eso era verdad. Yo dudaba que Bryan me viera como algo más que la hermana de Jordan... bueno, tal vez podría verme como una amiga, pero de ahí, nada más - además yo no sirvo para estas cosas del corazón y eso - confesé avergonzada.

Dijo que sería mi aliada y solamente sonreí - vas a luchar por una causa perdida, Syl... te lo estoy advirtiendo - dije con algo más de humor. Sylvie tenía esa capacidad de hacerle olvidar a la gente sus problemas y yo le agradecía por eso.

Una vez que la bruja se largó y Sylvie se sentó nuevamente luego de la caída que se dio, debido al susto... bueno, es que ¿a quién no le asusta la cara de Layla? en fin, me prometió que se cuidaría mucho - te tomo la palabra, Sylvie... no quiero verte en el hospital por uno de esos descuidos tuyos - dije negando con la cabeza

Me re í un poco ante la queja de Aleyah, sin duda ella no conocía a Bryan como yo, y sabía que mi mejor amigo era un encanto, a él poco le importaba quién fuera la chica, con tal de que se sintiera a gusto con ella y que además lo quisiera. Y sin duda Ale cumplía esos dos requisitos a la perfección, asíq eu lo único que faltaba, era darle un empujoncito a Bryan para que se diera cuenta de que esa chica lo quería.

- Ale, la cuestión es ¿lo quieres o no? Porque si lo quieres, entonces debes arriesgarte al 100% porque de otro modo, sólo estás poniendo trabas tú misma, y aunque seas mi amiga y te quiera mucho, Bryan es mi hermano en muchos sentidos, y lo conozco mejor que a nadie, si no estás dispuesta a correr los riesgos, ni lo intentes entonces, porque él es un chico encantador y sensible. - dije seriamente, podría intentar juntarlos, pero de ningún modo jugaría con los sentimientos de Bryan, si Ale no se comprometía a luchar, entonces mejor que lo dejara por la paz, para no darle ilusiones a mi mejor amigo.

Ella me pidió que yo me cuidara y yo asentí. ¿Cuántas personas no me decían eso millones de veces en el día? Bryan, Alex, Nate...

- Descuida, todavía hay Sylvie para rato.

Cuando me preguntó si lo quería o no, sentí que mi rostro se asemejaba cada vez más a un tomate. ¿Cómo podía preguntarme ella eso? ¡por supuesto que lo quería! y la verdad no sabía explicar la repentina alegría que me invadía cuando hablaba con él, aunque en el fondo me sintiera mal porque, hasta hace un momento, yo creía que él y Sylvie eran novios.
Suspiré mientras la escuchaba... todo esto es demasiado difícil para mí - Sylvie, yo no te voy a mentir... si te digo que de verdad yo... - ¡Argh! cómo me costaba decir esto - yo quiero a Bryan es porque... de verdad lo siento... y bueno, es... complicado porque hasta hace un par de minutos yo creí que era tu novio y no... no me permitía ver en él más que un amigo... porque yo sé que si él era tu novio tú eras la más indicada para verlo feliz... y ¿sabes? me gusta verlo feliz - continué mientras solataba un suspiro de resignación. Se lo había dicho todo a la mejor amiga de Bryan y si no conociera a Sylvie, creería que Bryan lo sabría todo esa misma noche. - Pero... no te tomes tantas molestias Syl... es evidente que no soy el tipo de chica que le gustaría a Bryan - dije suspirando e intentando de cambiar de tema.

Me reí cuando dijo que aún había Sylvie para rato - pues eso espero... no me gustaría que te pasara nada malo, Syl... eres una linda persona - y se lo decía de corazón. Sylvie podía ser torpe y algo atolondrada a veces, pero era una de las pocas personas leales y sinceras que había conocido aquí en Inglaterra.

Bueno, entendía perfectamente la postura de Aleyah, ya que ella había creído hasta hace unos minutos que Bryan y yo éramos novios, y el que ella no se quisiera interponer entre nosotros hablaba de una amistad genuina, lo que me hizo sonreír.

- Cariño, el tipo de chicas que a Bryan le gustan, son las chicas que lo quieren, no importa si eres rubia o no. Créeme que él es de las personas que no juzgan a nadie y que una vez que te abre su corazón, es el chico más lindo del mundo...si tú no quieres arriesgarte a intentar algo, entonces él jamás te va a dar una oportunidad, deberías a pensar en eso, pero no voy a insistir demasiado - le comenté mientras me pasaba una mano por el cabello y me quitaba unas moronitas que habían quedado adheridas a mi vestido.

Sonreí cuando ella me dijo que era una linda persona.

- Gracias, yo también creo que tú eres una linda persona - respondí siendo al cien por ciento sincera.

Escuché con atención a Sylvie. No podía creer que yo me estuviera abriendo con alguien... yo, que siempre era tan cerrada y hermética con mis cosas, especialmente con mis sentimientos le estaba contando a Sylvie que me gustaba su mejor amigo y que lo quería... y mucho.
- yo... Sylvie... quiero mucho a Bryan, pero... tengo miedo. Yo nunca he intentado nada con un chico y pues por eso tengo miedo y ya - dije antes de soltar un suspiro - yo puedo arriesgarme, Syl... de hecho, por él lo haría pero... yo sé que a él no le importo - dije con una sonrisa amarga, antes de tomar el último sorbo de chocolate.

Que Sylvie me dijera que yo era una linda persona, hizo que una sonrisa sincera se dibujara en mi rostro - no dirías eso si me conocieras bien - dije con amargura... cuando estaba de mal humor era la más odiosa y bruja que podía existir en el planeta... y si bien mi carácter elitista y arrogante había desaparecido casi por completo gracias a Jordan, muchas veces no podía evitar ser demasiado clasista.

Me daba tanta ternura oír a Aleyah hablando, era una chica grandiosa, con un corazón de oro, y sabía - por toooodos los años que llevaba con Bryan que juntos serían muy felices. Bryan era del tipo de chicos que eran honestos y dulces con las chicas, por lo que ALeyah tendría un primer amor grandioso. Y ella era tierna e inocente, justo la chica para él, que lo mimara y lo hiciera sentir único.

Definitivamente estaban hechos el uno para el otro y yo me iba a asegurar de verlos juntos. Costara lo que costara. - Descuida linda, haremos que Bryan se dé cuenta de lo bella que eres por fuera y por dentro...él es un chico dulce y tierno y te protegerá como tú necesitas, ya lo verás - tomé su mano y le sonreí, sabía que estaba apostando fuerte, pero Bryan era mi hermano del alma y estaba segura de que sí funcionaría.

Ella me dijo que si la conociera mejor, no diría uqe era una linda persona, a lo que yo chasquée la lengua molesta - Linda, todos tenemos neustros defectos, y tengas los defectos que tengas, yo te seguiré considerando una hermosísima persona, claro que para eso, tienes que confiar en mí, yo jamás voy a juzgarte Ale y si necesitas una amiga, aquí estoy yo.